LUNES
¡Comenzamos un nuevo curso en Star Camp! Los alumnos de colegio Salesianos Estrecho de Madrid tendrán el honor de ser pioneros en esta nueva aventura basada en el descubrimiento del nuevo continente. Una experiencia lúdica y formativa en la que la historia, el inglés y el juego se dan la mano para dar forma a una semana inolvidable.
Después de su llegada, se asentaron en el espacio y formamos los grupos de clase. Cada uno representa una compañía que deberá crecer durante cinco días para explorar y conquistar nuevos territorios.
Los jóvenes se divirtieron en el campo de minigolf y comieron macarrones y pollo en salsa. Durante la tarde, ahondaron en el proceso que siguió Cristóbal Colón para convencer a los Reyes Católicos de invertir en su empresa mediante juegos y dinámicas grupales. Tuvieron que dividirse en diferentes roles para dar forma a su propia empresa, y adquirir materiales que puedan ser útiles en su empresa.
Más tarde defendieron sus decisiones (en perfecto inglés) ante los Reyes Católicos en una ceremonia inspirada en las Capitulaciones de Santa Fe. Ese fue el broche de oro para un maravilloso día y una maravillosa toma de contacto.
Tras cenar una deliciosa crema de verduras y hamburguesa, jugaron a la versión StarCampera del pueblo duerme, salimos al pueblo y descubrimos quien era el asesino del pueblo.
¡Seguiremos informando de sus muchas aventuras en Star Camp!
MARTES
Concluye nuestro segundo día en Star Camp, ¡ha sido muy ajetreado!
Hicimos acopio de fuerzas con un buen desayuno y dedicamos la mañana a realizar diversos talleres relacionados con la era medieval: realizamos un astrolabio, practicamos tiro con arco y aprendimos como formar diversos nudos. Comimos un buen plato de lentejas y tortilla de patatas, y luego celebramos un pequeño torneo de fútbol.
Por la tarde, fuimos a la naturaleza, y en la Ruta de los Ríos de Arévalo mezclamos los equipos para jugar un juego de mesa relacionado con el viaje de la Pinta, la Niña y la Santa María: cada grupo representaba una de las carabelas, y debían abrirse paso entre océano hasta llegar a su destino: América. Tomamos la merienda en un paraje encantador: el castillo de Arévalo.
Cenamos deliciosas empanadillas y patatas foster (que siempre son un éxito), y finalizamos el día con el célebre pasaje del terror. Ya estamos preparados para alcanzar la mitad de la semana, ¡pero aún quedan muchas cosas por descubrir!
MIÉRCOLES
Que día tan ajetreado! La expedición ha decidido asentarse en nuevos territorios, entrando en contacto con la población nativa, así que dedicaron la mañana a preparar la gran actividad del día: ¡El gran mercado de las culturas!
A cada grupo se le asignó una cultura diferente y tuvieron que prepara un puesto en el que vender productos relacionados con ella, en un ejercicio de imaginación, creatividad y gestión de recursos, ya que debían adquirir primero con la moneda del campamento el material del que querían disponer.
Comimos guiso de carne y albóndigas, y por la tarde, vendieron los productos que habían creado al resto de las culturas. El mercado es una actividad muy rica en la que, además, los jóvenes deben redactar en inglés y presentar ante los demás la civilización que han escogido, para así conocer más de cerca aquellas sociedades.
Después de cenar pasta carbonara y varitas de merluza, tuvo lugar la medieval fair, una actividad divertidísima en la que los jóvenes participan en minijuegos clásicos. Los más hábiles reciben buenas recompensas, ¡una dinámica perfecta para concluir un día maravilloso!
Queda únicamente un día completo, y promete ser más intenso si cabe que los anteriores, ¡Arévalo nos espera!
JUEVES
Hoy nuestros aventureros vivieron una jornada muy especial.
Por la mañana pusimos rumbo a Arévalo, donde nos sumergimos en su historia recorriendo algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Fue un paseo lleno de curiosidad, fotos y anécdotas que los niños disfrutaron muchísimo.
Después de la visita, recargamos fuerzas con un delicioso cocido que nos supo a gloria tras la mañana de exploración.
Por la tarde, la emoción continuó con Conquest, un juego inspirado en el famoso Catan, donde la estrategia, el trabajo en equipo y la diversión fueron protagonistas.
La noche puso el broche de oro al día: una cena con aire medieval —alitas de pollo barbacoa y nachos con queso— y, para terminar, todos se vistieron para disfrutar del show y la discoteca final, una fiesta llena de música, baile y sonrisas que cerró esta jornada inolvidable.